Entradas

Mostrando entradas de enero, 2012

A walk on the wild side

Imagen
Un abuelo -pelo blanco nuclear, 80 años sobradamente cumplidos y un rostro en el que aún pueden leerse las huellas del niño travieso que fue- apura un cigarrillo a las puertas de una Residencia de la 3ª edad del centro de la capital. No disimula el frío que hace tiritar su cuerpo y castañear su dentadura -postiza-, pues el sol que acaricia las mañanas de invierno es, como dicen las señoras de Castilla, "un sol de uñas", que brilla pero no calienta. Tampoco la incomodidad, apoyado en el alfeizar de una ventana baja que da a la calle, con un periódico que hace las veces de cojín -la actualidad aplastada por la experiencia-. Pero a juzgar por su expresión extasiada, ni el frío, ni lo incómodo de la postura, ni tampoco la poco ortodoxa utilización de la prensa del día logran eclipsar el placer de unas cuantas bocanadas de humo, el dulce sabor de la clandestinidad. Paso por delante de él, adentrándome en la nube blanca y estilizada que ha construido su boca de fum